Tipo: Vertebrados
Clase: MamÃferos
Orden: Artiodáctilos
Familia: Bóvidos
Foto cedida por Phaedra Wilkinson
CaracterÃsticas
Longitud: Hasta 3,25 metros
Altura a la cruz: Hasta 2 metros
Peso: De 600 a 1000 Kg
Longevidad: Hasta 25 años
Descripción
El Yak es un rumiante de gran tamaño que pertenece a la familia de los bóvidos y habita en las altas montañas del Tibet en zonas de entre 4000 y 6000 metros de altitud. Tiene el pelaje lanoso y tupido, formado por largos mechones que le proporcionan un aislante natural para protegerlo del frÃo. Aunque existen animales en estado salvaje, la mayorÃa de los yaks que hay en la actualidad se encuentran domesticados. Los tibetanos aprecian mucho su carne, su leche, que es muy rica en materia grasa y es de color rosa, y sus pieles. Los pelos más largos del animal se utilizan para hacer sogas, y las hebras más finas y de más calidad son aprovechadas para confeccionar mantas y vestidos. Se utilizan incluso sus excrementos como combustible.
Los yaks en estado salvaje son de mayor tamaño que los domésticos. Los machos viven en solitario, mientras que las hembras y las crÃas forman pequeñas manadas. La época de celo coincide con el mes de septiembre y dura aproximadamente un mes. La hembra pare una sola crÃa tras un periodo de gestación de 9 meses.
Los yaks pueden cruzarse con vacas domésticas y generar individuos fértiles. Esta es la causa de las diferencias de tamaño entre los yaks salvajes y los domésticos.
CaracterÃsticas
Longitud: Hasta 3,25 metros
Altura a la cruz: Hasta 2 metros
Peso: De 600 a 1000 Kg
Longevidad: Hasta 25 años
Descripción
El Yak es un rumiante de gran tamaño que pertenece a la familia de los bóvidos y habita en las altas montañas del Tibet en zonas de entre 4000 y 6000 metros de altitud. Tiene el pelaje lanoso y tupido, formado por largos mechones que le proporcionan un aislante natural para protegerlo del frÃo. Aunque existen animales en estado salvaje, la mayorÃa de los yaks que hay en la actualidad se encuentran domesticados. Los tibetanos aprecian mucho su carne, su leche, que es muy rica en materia grasa y es de color rosa, y sus pieles. Los pelos más largos del animal se utilizan para hacer sogas, y las hebras más finas y de más calidad son aprovechadas para confeccionar mantas y vestidos. Se utilizan incluso sus excrementos como combustible.
Los yaks en estado salvaje son de mayor tamaño que los domésticos. Los machos viven en solitario, mientras que las hembras y las crÃas forman pequeñas manadas. La época de celo coincide con el mes de septiembre y dura aproximadamente un mes. La hembra pare una sola crÃa tras un periodo de gestación de 9 meses.
Los yaks pueden cruzarse con vacas domésticas y generar individuos fértiles. Esta es la causa de las diferencias de tamaño entre los yaks salvajes y los domésticos.
